En Puerto Rico, la Navidad no dura semanas… ¡dura meses!
Una isla que celebra con alma y alegría
En Puerto Rico, la Navidad no se mide en días, sino en emociones.
Aquí, el espíritu navideño se enciende el 1 de noviembre, cuando las primeras luces adornan los balcones y los supermercados ya suenan a plena y aguinaldos. Y no termina hasta bien entrado enero, con las alegres Fiestas de la Calle San Sebastián, el cierre perfecto para casi tres meses de celebración, música y unión.
La Navidad boricua es un festival de sentidos.
Las calles vibran con parrandas, donde amigos y familiares llegan de sorpresa a cantar bajo el brillo de las luces y el sonido de panderetas, maracas y güiros. En cada casa, la mesa se llena de manjares típicos: pasteles, lechón asado, arroz con gandules y tembleque, mientras el coquito casero se convierte en símbolo de compartir y celebrar.
Y, por supuesto, cada rincón del hogar se impregna de esos aromas cálidos que nos hacen suspirar: pino fresco, canela, clavo, coco, y frutas dulces, recordándonos que la Navidad en Puerto Rico es más que una temporada —es una manera de sentir la vida.
Paulicea: el aroma de nuestras tradiciones
En Paulicea, creemos que cada vela puede contar una historia.
Por eso, nuestras velas artesanales están inspiradas en los recuerdos más dulces de la Navidad boricua —hechas a mano con cera de soya natural, aromas cuidadosamente seleccionados y el deseo de llenar cada espacio de calidez y nostalgia.
💫 Colección Navideña Paulicea:
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Brisa Navideña: fresca y alegre, captura el aire festivo que se siente desde los primeros días de noviembre.
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Manzana con Especies: una mezcla acogedora que recuerda las sobremesas largas y el calor de hogar.
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Coquito: cremosa, dulce y tropical; el aroma perfecto para quienes viven la Navidad con sabor boricua.
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Arbolito de Navidad: notas de pino fresco que evocan la emoción de montar el árbol en familia.
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Canela: el clásico aroma de las cocinas boricuas, símbolo de tradición y amor.
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Cranberry: vibrante y frutal, un toque moderno para los corazones festivos.
Cada vela es una invitación a encender un recuerdo, a revivir un momento, y a llenar tu espacio con el espíritu de la Navidad más larga del mundo.
Las Navidades en Puerto Rico son una mezcla de fe, música, comida y comunidad.
Son los abrazos en la misa de gallo, los villancicos al ritmo del cuatro, los vecinos compartiendo arroz con dulce y las familias decorando juntas.
Y cuando el año nuevo llega, seguimos celebrando con las Octavitas y los Reyes Magos, extendiendo el gozo hasta las icónicas Fiestas de la Calle San Sebastián, donde la alegría se desborda por las calles del Viejo San Juan.
Encender una vela Paulicea en medio de todo esto no es solo un gesto decorativo —es una forma de rendir tributo a nuestra esencia, a ese calor humano que hace de Puerto Rico un lugar donde la Navidad nunca se apaga.
Paulicea es una empresa netamente puertorriqueña, un emprendimiento individual nacido desde el hogar, donde cada vela se vierte a mano con dedicación, amor y propósito.
Cada aroma representa una historia, una memoria y un pedacito de la isla: desde la mezcla del coquito que pasa de generación en generación, hasta el olor del pino que llena la casa mientras suena una plena de fondo.
Al encender una vela Paulicea, estás apoyando lo hecho en casa, lo hecho con alma, y lo hecho en Puerto Rico.
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